El pasado día 2 fui con mi contraria a visitar a los amigos Rosa e Iñaki en Kanala , un bello paraje de Euskadi en la ria de Guernica. Este encuentro anual lo tenemos establecido de hace muchos años, un año vienen ellos a nuestra casa y otro vamos nosotros, lo pasamos muy bien, comentando la actualidad, paseando, recordando viejos recuerdos y porque no decirlo, disfrutando también de una buena mesa.
En esta ocasión nos regalamos como entrantes con unos pimientos de Guernica fritos,
Para remate y por si alguien tenia hueco un medallón de solomillo a la plancha con pimientos cerró el menú de platos salados.
os postres no fotografié, este se compuso de flan de coco, melocotones asado y unos pastelillos de la Tahona Artepan que llevé de Vitoria.
Como pueden apreciar un menú completo y bien diseñado.
Aquí les presento al personaje de la casa, no se que estará esperando esta bonita perra, pero la cara la tiene bien expresiva.
5 comentarios:
Me ha encantado el menú, para mi excesivo, pero no se que me hubiera dejado. . .
La perrita preciosa, se parece a una que tenemos en la familia.
Saludos
estupendo menu, para mi excesivo, demasida comida para un dia pero seguro que todo exquisito
¡¡besos¡¡
Gracias por la visita y comentario.
De vez en cuando hay que hacer algún exceso no?
Todo estaba deliciosos y cuando la compañía es buena, todavía todo sabe mejor.
Saludos
Tenía curiosidad por saber qué habrían comido y veo que el festín fue espectacular. Primero por supuesto sorprende la cantidad, se nota que los vascos son buenos comedores, ahí me gusta mucho esa faceta. Luego me admira la de preparados de pescado que han tomado, bacalao, calamares, merluza... y de remate, carne también, vamos, que con hambre no se debió quedar nadie.
La perra es preciosa, está atenta y amorosa. Seguro que fue un día muy bonito para ustedes. Enhorabuena.
Un abrazo.
Hola Viena:
Mientras nos dejen, que igual también nos recortan esto, seguiremos comiendo. Aunque lo del comer bien no es patrimonio de los vascos exclusivamente, Se come muy bien por toda la península.
Con la perra disfruté, más viendo, como se arrimaba a Oro, que no le gustan nada los perros y la perra lo detecto al momento y venga darle vueltas por todos los lados.
La verdad no quedamos con hambre, pero le diré una cosa, fui hace unos días a un restaurante que han abierto, de corte italiano, comí lo habitual en un restaurante, que no tenían más que menú al medio día. A las dos horas estaba con la boca pastosa, lo atribuyo a las grasas que emplearon en la cocina, con el menú de mis amigos, ningún efecto secundario.
Que pase buen día.
Saludos
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